Soy un Persa himalayo, colorpoint de pelo largo, y me integré al Mundo de Dalí en junio de 2016. Mi pelaje es abundante, soy muy peludo, mi cara es chata y sí, soy un hombre calmado y serio. Claro que hay algo que me fascina y entusiasma... si escucho la campañilla del arnés, !corro para que me saquen a pasear! Soy un tipo maduro y pongo orden en el cat café. De hecho, me asignaron el cargo de Supervisor para evitar cualquier tipo de conflicto entre los peludos, además de ser el encargado de dar la bienvenida a los nuevos.
Yo era chiquitita y me dejaron abandonada en el Club Hípico, hasta que un día me rescataron de una fundación y luego me adoptaron en El Mundo de Dalí. Soy menudita, tierna y estoy lejos de ser una gata perfecta. Tengo estrabismo, la cola y patas cortas, pero nunca el sufrimiento me ha detenido. Yo siempre salgo adelante, no me meto en peleas y pongo la dulzura antes que nada en la vida. Dicen que me encuentran inocente, no sé a qué se refieren, solo sé que soy la princesa del cat café.
De chico lo pasé mal. Nací en una casa, pero me maltrataban, hasta que me rescataron y me llevaron a un hogar temporal. Yo solo tenía 3 meses de edad, no merecía eso, hasta que me adoptaron del Mundo de Dalí y mi vida cambió. Empecé a crecer y lucirme como todo un tabby bicolor de ojos verdes, esbelto, con gran personalidad y “chispeza”. Es que a mí me gusta jugar y ser divertido, soy un poco centro de mesa, jaja y cuando puedo me subo a las mesas y robo algo de comida. Es una maña que han tratado de sacarme, pero yo soy porfiado con eso... es muy entretenido robarnos la crema, jajaja.
Al igual que mis hermanos del Mundo de Dalí, me sumé a este maravilloso lugar luego de haber sido rescatado por una fundación. Llegué con 7 meses de edad, muy flaco, muerto de hambre y al verme tratado con tanto cariño, afloró en mí toda la gratitud que un gatito puede tener hacia los humanos. Soy un gato van bicolor, con un corazón grande y querendón, pero paradójicamente, tengo una insuficiencia cardiaca, por lo cual, tengo que tomar un medicamento diario y simplemente tratar de ser feliz cada momento. Aunque por eso me dicen Corazón Valiente, mi nombre real proviene de la semejanza de mi mancha en la cara con el bigote del genial Charles Chaplin.
Era un día de lluvia, yo era guagua, iba hambriento, todo mojado en una caja y me dejaron en su puerta, historia parecida a la del legendario Moisés. La señora Rossana me recibió cálidamente en sus brazos y se puso en contacto con El Mundo de Dalí. Quedó en esterilizarme y dejarme listo para entregarme a alguna buena familia en una jornada de adopción, pero, los días fueron pasando y no alcanzó a prepararme. Tampoco podía tenerme más en su peluquería, entonces... me recibieron y me fui quedando en el cat café. La vida no pudo haber sido más buena conmigo.
También me abandonaron en la peluquería de la señora Rossana. Al verme en ese lugar, me la jugué por ser útil a modo de agradecimiento por sus cuidados, y me postulé como masajista. Ella estuvo de acuerdo, entonces yo era el encargado de recibir a las clientas, me subía sobre sus rodillas mientras le hacían el cabello y yo las relajaba, les ronroneaba y les amasaba suavemente las piernas. !Eso les encantaba! Y yo me sentía muy especial. Hoy, esa es mi principal función en El Mundo de Dalí se fijó en mí.
Me integré a El Mundo de Dalí cuando estaban en la calle Dr. Johow, a fines de 2016. Ahí me fueron a dejar en un bolso junto a mi hermana. Al poco tiempo ella se fue adoptada y yo me quedé. Me pusieron Sombra porque era muy negrita y retraída. Con el tiempo fui ganando confianza, poco a poco, mi pelaje se fue poniendo más largo y mi carácter un poco más dócil. Soy tranquila, pero igual no me gusta que me molesten. Adoro mi silencio, mi espacio personal, pero también puedo socializar con otros gatos y humanos siempre que su vibra sea buena, si no, ni me acerco. Soy feminista y medio chascona, lo sé, no me acicalo mucho. Lo que pasa es que la vanidad no va conmigo.
Cuando yo tenía más de 1 año y estaba en pésimas condiciones, me salvó la vida una rescatista. Luego llegué al Mundo de Dalí, donde sería dada en adopción, pero me fui quedando… Al principio era muy tímida pero cuando me hice amiga de Martín agarré confianza, me relajé y empecé a ser feliz. Me porto bien, soy respetuosa y no peleo. Tengo los ojos verdes, mi pelaje es negro, corto y brillante, parezco una pantera. Soy una gata elegante y bien portada. Cuando me veas, por favor no preguntes si estoy preñada, ¿ok? Tengo guatita, eso es todo. La belleza no es exclusividad de las flacas. Yo, por ejemplo, soy preciosa. Estoy muy agradecida del Mundo de Dalí.
Yo vengo del sure, de Chiloé vengo yo. Allá me fueron a buscar los del Mundo de Dalí a mí y a mi hermana Elena. Buen pique…Yo soy un joven Scottish straight y vengo a ser como el representante de mi tío Dalí aquí en el cat café, soy el jefe de terreno. Mi pelaje es extremadamente suave, como un peluche y tengo esa cuota de inocencia del que es sureño. Soy bien regalón y un poco despistado, pero esto de haberme hecho amigo de Narú, Paris y Chaplin, como que me está ayudando a sacar más confianza en mí mismo. Es que a veces siento que tengo una enorme responsabilidad aquí con el negocio, quiero quedar bien con mi tío, pero no sé bien cómo hacer las cosas, aunque le pongo harto cariño, eso sí.
Soy hermana de Dalí Junior, y mi raza es Scottish fold, porque tengo las orejitas dobladas. Mi pelaje es muy suave, tricolor calico pastel. Cuando nos trajeron de Chiloé con mi hermano, yo estaba fascinada. Esto de venirse a vivir a la capital sería alucinante. Es que siempre tuve inquietudes intelectuales que allá en el campo iba a ser difícil desarrollar. Debe ser algo de la sangre escocesa, que tenemos. Llegamos al Mundo de Dalí y para mí fue como llegar al paraíso. De inmediato me trepé a las gatificaciones y las recorrí sin miedo alguno. Soy una gatita inteligente, audaz y aprendo al tiro. Los demás gatos del grupo son divertidos, con unos soy más cercana que con otros, obvio, lo mismo que con los humanos que nos visitan.
Cuando pequeño era un gatito tímido y desconfiado, rescatado a los 2 meses de edad fui parte de un hermoso proyecto de la Corporación Siete Vidas en el que el objetivo principal era enseñarme nuevamente a confiar en los humanos, sin imaginar que mi rehabilitación sería tan exitosa que llegaría a ser parte de El Mundo de Dalí Catcafé. Ahora soy un gatito cariñoso, sociable, introvertido a veces, pero muy juguetón. Mis mejores amigos son Narú y Dalí Jr.
Llegué solita a vivir a un Hogar de Ancianos en Ñuñoa y me hice muy amiga de las señoras que controlaban el acceso. Yo vivía en la calle, estaba preñada y dí a luz a 5 hermosos gatitos que los humanos entregaron en adopción, pero mi hijito más pequeño, que era igual a mi, nadie lo quizo y una persona de muy buen corazón lo adoptó. Ella me buscó un hogar donde vivir, estuve en hogares temporales hasta que me avisaron que quizás iba ser anfitriona en El Mundo de Dalí, yo me emocioné mucho, así que empecé a mostrar mi mejor talento, ser simpática con todos y dejarme querer. Hasta que llegó el día!! y desde ahí que soy inmensamente feliz con mis amigos gatunos.
Yo nací en un lugar donde hay mucho abandono de animalitos y cuando un día estaba en la calle, solo y con hambre me propuse encontrar un hogar. Justo escuché que habían muchas personas en un consultorio, así que corrí, llegué y elegí a dos personas que sabía me salvarían!! Maullé mucho, las seguí hasta que me miraron y no pudieron resistirse, yo era tan pequeño y gris, que me bautizaron como "Carboncito", sin embargo ellas no podían tenerme para siempre, pero contactaron a Dalí y nuevamente mostré mis mejores dotes de anfitrión y me aceptaron!! En El Mundo de Dalí soy muy cariñoso y me gusta compartir con todas las personas y con todos los gatos, tengo mucha energía y ronroneos para dar. Dicen que físicamente me parezco a Moisés.
Cuando era muy pequeñita me dejaron en una caja con mi hermana Niebla en la puerta de una casa, estaba todo oscuro y no veía bien, hasta que salió una mujer que nos vió e inmediatamente nos dió refugio y cariño, Ella nos cuidó, nos salvó de morir y un día recibió un llamado de que buscaban nuevos anfitriones para El Mundo de Dalí Catcafé y no creí hasta que los vi, fueron directamente a vernos y yo mostré todos mis talentos, corrí para allá y para acá, hice ronroneos, jugué y esperé hasta el día que puse mi primera patita en el catcafé y descubrí un "fantasilandia gatuno". Todos los gatitos me recibieron muy bien, pero nunca olvidaré los consejos del primer gato que me dió la bienvenida, si, nuestro querido Mitty y su sabiduría. Me dicen que parezco un Lorito porque me encanta subirme a los hombros y espaldas, así que... en cualquier momento me verás cerca de tí jejeje.
Al igual que mi hermanita Carletta, cuando supe que nos querían como anfitrionas del catcafé me emocioné mucho, sólo podía ronronear de felicidad y aunque yo soy más tranquila que mi hermana (que es bastante loca), disfruto mucho de esta maravillosa vida. Espero que mis 7 vidas sean así de especiales. Me gusta mucho que me hagan cariño en la cabeza. Te espero en el Mundo de Dalí Catcafé!
Soy la más joven del clan, llegué a los 3 meses y descubrí un mundo de juegos y alegría. Cuando era una recién nacida, un humano decidió tirarnos a mi hermanito y a mi como si fuéramos basura en el jardín de una casa, pero ese día, con el miedo que tenía de no saber qué iba a pasar, una mujer de muy nobles sentimientos, nos encontró y nos llevó a su casa. Mi sorpresa fue mayor cuando vi que habían muchos gatitos y que en realidad habíamos llegado a la casa de una rescatista de gatos!!! Ella nos limpió, nos cuidó, pero mi hermanito no pudo recuperarse y partió al puente del arcoiris, ahí yo prometí que saldría adelante y crecí fuerte y sana. Un día mi humana de ese entonces me dijo que en El Mundo de Dalí Catcafé buscaban nuevos anfitriones y que estaban interesados en mí, desde ese momento que soy especialista en enamorar humanos, correr por todas partes para que todos me vean y limpiar mucho mi pelaje para verme divina! Me llevo muy bien con todos, los quiero mucho y soy experta en ronroneos intensos.
